Nos lo han repetido hasta la saciedad, no hay que ser esclavos de la moda cada uno debe tener su estilo, saber que le va y que no y explotarlo sin embargo es tan fácil caer en la tentación, me encanta caer en esta tentación la de nutrir mi fetichismo, todos lo somos en mayor o menor grado de reconocimiento, pero negarlo no implica que no este.
La casa Bibian Blue saca lo peor de mi o lo mejor, las ganas de jugar, coquetear, la moda es todo y nada, empieza y termina donde nosotros digamos.
Disfrutad de la visión de un cuerpo modelado por un corsé…